Eudosio Horcajada Hervias

 

 

En esta segunda entrega pretendo ensalzar la figura ejemplar de nuestro vecino, Eudosio Horcajada, que cuenta en la actualidad con 94 años y una salud envidiable junto a una memoria lucida.

 

Hijo de Antonino Horcajada y Eulogia Hervias, es el tercero de los diez que tuvo este matrimonio. llego al mundo un  7 de Diciembre en el año 1913, desde entonces no ha parado de trabajar para sacar adelante a su familia compuesta por su esposa, Ernestina y sus diez hijos.

 

No todo el camino ha sido de color de rosa, con tan sólo 8 años comenzó a trabajar realizando labores en el campo arreando una borrica en la noria  para regar patatas, recogiendo aceituna, segando, de albañil, quemando hornos de albariza para extraer yeso, entre otros. Algunos de estos trabajos lo realizó junto a sus inseparables hermanos, Justo, Carmen y Antonino.

 

En 1954 emigro a Lérida al lado de sus hermanos Julián y Domingo, durante un año estuvo allí como albañil. Su esposa, Ernestina y sus hijos Carmen, Eduardo, Ernesto y Eulogia se ivan y venían por temporadas a Cabezamesada, su hijo Eduardo permaneció a su lado todo el tiempo.

 

De Lérida regresó a Cabezamesada y en el año 1964 se trasladaron a Madrid a buscar nuevas experiencias. En un primer momento sólo se desplazaron a la capital, Eudosio padre e hijos Carmen y Eduardo, los cuales, vivieron unos meses en casa de Carmen y Gregorio en el barrio Madrileño de Orcasitas.

 

Al año siguiente la familia Horcajada Tello, se desplazaron a vivir a Palomeras altas (Vallecas), donde residieron 12 años.

 

Su próximo destino fue Móstoles, en esta localidad vivió intensamente con sus amigos paseando, tomando el fresco en el parque y jugando la partida en el hogar del jubilado.

 

Querido abuelo Eudosio, todos los que te conocemos sabemos que eres un hombre honrado, trabajador, ligón, divertido, con sentido del humor y amante de tu pueblo, ahora es el momento de tenerte como un rey porque te lo mereces.

Desde hace unos meses, Eudosio, vive con algunos de sus hijos por temporadas disfrutando cada día  de sus vivencias y anécdotas. Lo que nos ha sorprendido tanto a hijos como a nietos es su afición a la lectura- los especialistas dicen que leer ejercita la memoria- es decir, que si no hay obstáculo en la salud del amigo Horcajada, tendremos a Eudosio para rato.  Si a lo anterior le sumamos que hace unos días tuvo un sueño en el que duraba 105 años, es evidente que sobran las palabras. Su gran ilusión sería vivir en la residencia de su pueblo natal, algo que en reiteradas ocasiones repite una y otra vez…

Con estas últimas líneas me despido de ti deseándote sobre todo mucha salud y que la vida te sonría, ¡Querido!

Reflexión:  “No tengo miedo a morir, además cómo me alimento bien y duermo muchas horas voy a durar 105 años.